Los 58 reactores nucleares de Francia tienen deficiencias, según el informe preliminar.
Según un borrador de un informe oficial, que fue filtrado a la prensa, se encontraron cientos de problemas en las plantas nucleares de Europa que pueden requerir unos US$32.000 millones para su arreglo.
El informe, encargado después del desastre nuclear de Fukushima en Japón en marzo de 2011, tenía como objetivo investigar cómo reaccionarían las plantas de energía nuclear de Europa en situaciones de emergencia.
El documento final se publicará el jueves. La versión preliminar que se filtró el martes asegura que casi todas las plantas nucleares de la Unión Europea, de las 143 que existen, necesitan mejoras.
Los grupos de activistas que se oponen a la energía nuclear dicen que las advertencias del informe no van lo suficientemente lejos.
Por su parte, la agencia reguladora de la seguridad nuclear en Europa pidió a la Comisión que no utilice un lenguaje que pueda socavar la confianza de la ciudadanía, dice el periodista de la BBC en Bruselas, Chris Morris.
Fracasos franceses
El texto, cuya redacción puede cambiar antes de que se publique la versión final el jueves, señala que en la Unión Europea, 47 plantas nucleares con 111 reactores tienen más de 100.000 habitantes viviendo en un radio de 30 kms de distancia.
"Según los resultados de las pruebas de resistencia, prácticamente todas las plantas nucleares necesitan mejoras en cuanto a su seguridad", se constata en el informe filtrado.
"Cientos de medidas de actualización técnica ya se han identificado.
"Tras los accidentes nucleares de la isla de las Tres Millas y Chernóbil, se acordó la adopción de medidas urgentes para proteger las plantas nucleares. Las pruebas de resistencia demostraron que incluso hoy, décadas más tarde, la implementación de dichas medidas sigue pendiente en algunos estados miembros".
"Si este ejercicio fuera serio, la Comisión debería recomendar el cierre de los reactores inseguros o envejecidos"
Rebecca Harms, Grupo de los Verdes/Alianza Libre Europea en el Parlamento Europeo
Cuatro reactores de dos países sin nombrar tendrían menos de una hora de tiempo para restaurar las funciones de seguridad si se perdiera el suministro eléctrico, añade el documento.
En Francia, el mayor productor de energía nuclear de Europa que depende de 58 reactores nucleares para el 80% de su electricidad, se encontraron fallos específicos en los 58 reactores.
Anteriormente este mes, una explosión por un escape de vapor quemó a dos personas en la central de Fessenheim, en el este de Francia, sede de uno de los reactores nucleares más viejos del país que desde hace tiempo es objeto de protestas de los activistas antinucleares.
Fessenheim, cercano a las fronteras de Francia con Alemania y Suiza, abrió en 1977 y obtiene el agua para su refrigeración del Rin, pero los activistas dicen que su ubicación hace que sea vulnerable a la actividad sísmica e inundaciones.
También se hallaron deficiencias en Reino Unido. La mayor parte de las centrales nucleares del país carece de una cámara de control de emergencias que se pueda emplear en caso de que la principal se contamine por una alta radiación, denuncia el informe.
El Departamento de Energía británico dijo que no hay pruebas de que las instalaciones nucleares de Reino Unido no sean seguras.
"Sin embargo, el gobierno está comprometido con el principio de la mejora continua", le aseguró un portavoz a la BBC.
El terremoto y tsunami de Japón en 2011 causó el desastre nuclear de la empresa Tepco en Fukushima.
"Estamos colaborando estrechamente con la Oficina para la Regulación Nuclear para asegurar que los operadores traten cualquier tema específico de las instalaciones de acuerdo al robusto régimen regulatorio británico, que requiere que los operadores adopten todos los pasos posibles para reducir el riesgo y que busquen constantes mejoras de seguridad".
Petición de cierre
Si bien las pruebas de resistencia hallaron deficiencias en muchos de los reactores nucleares europeos, los activistas sostienen que fallaron en el señalamiento de riesgos en áreas cruciales, como una tecnología cada vez más vieja, ataques terroristas o errores humanos.
"Si este ejercicio fuera serio, la Comisión debería recomendar el cierre de los reactores inseguros o envejecidos", dijo Rebecca Harms, copresidenta del Grupo de los Verdes/Alianza Libre Europea en el Parlamento Europeo.
"Como mínimo, la Comisión debería presionar para que las deficiencias de seguridad identificadas en el informe sean subsanadas".
Para junio, clic las 143 plantas nucleares de la Unión Europea se tenían que haber evaluado según criterios que abarcaran tanto peligros naturales como posibles fallos causados por los humanos.
Algunos gobiernos reconsideraron su política de energía nuclear tras el desastre de Fukushima, momento en que Alemania decidió abandonar la energía nuclear y sustituirla por tecnología verde y plantas más limpias que funcionan con gas y carbón para 2022.
Otros, como Francia, reforzaron las inversiones en energía nuclear desde el accidente de 2011.
Los sistemas de refrigeración de la planta nuclear Daiichi de Fukushima sucumbieron a causa del terremoto y posterior tsunami del 11 de marzo de 2011 en Japón. El desastre generó la fusión de tres de los reactores.